Festivo dello Estinto
Festivo dello Estinto V es la quinta edición del torneo Storyline con temática Sabbat. Un torneo diferente, que pretende ser referente del calendario de eventos de la comunidad de VTES española. La gran aceptación que FdE ha tenido durante años nos ha animado a organizarlo una vez más, y con vuestra ayuda, que pueda repetirse en el futuro.
Un Storyline es un torneo de VTES que cuenta con reglas especiales que pueden afectar a la mecánica del juego, a la construcción de las barajas o, como viene siendo tradición del FdE, incluir cartas únicas para el evento. Estás reglas especiales se basan en la narrativa relacionada con la metatrama de Mundo de Tinieblas. Además, se pretende que el resultado de estos torneos influya en esa misma metatrama y tengan su eco en futuras publicaciones, ya sean de VTES o de Vampire V5.
Festivo dello Estinto VI está ambientado en los hechos que tuvieron lugar en las mesas de la anterior edición. De las acciones más notables de aquellas partidas hemos elaborado un hilo argumental que deja como protagonista a Owain Evans, vástago principal del mazo ganador de aquel evento.
“La cocina es amor. Preparar el alimento para otros es una de las mayores expresiones de afecto que podemos compartir.
Cocinar es una gran responsabilidad. Y del otro lado, permitir que otro prepare tu comida exige una confianza completa, casi un acto de fe, confiar en que no intentan envenenarte, sin ir más lejos. Este es el primer paso de la relación entre cocinero y comensal. Una relación que, por necesidad, transmuta en cariño.
Para el cocinero, ofrecer alimento fiable y seleccionar los ingredientes adecuados es solo el inicio; “preparar” deja de ser suficiente y aparece el deseo de elaborar. La cocina no es tan solo una combinación de técnicas, la cocina es un arte y como tal, el artista desea que su esfuerzo sea apreciable y apreciado. Es natural, por tanto, que su objetivo sea agradar. Su moneda de cobro: la satisfacción del comensal.
Para el comensal, alimentarse de lo preparado por otro es un gesto de confianza máxima. Quien lo permite, una vez la fiabilidad del alimento se da por sentada, se hace necesario otro sistema de medida para la valoración del manjar: El sabor, la textura, la novedad,… Estos y otros elementos se conjugan y dan lugar a una nueva escala de valores que permite evaluar la labor del cocinero. Y el comensal paga con su deleite.
Pero esto no es un baile de parejas. Además de los comensales y el cocinero, personajes principales de esta fiesta, no podemos olvidar al gran protagonista: El Elegido. Aquel que, como Abel, ha sido, es y nos ofrece su carne y su sangre como bendición, para que pueda seguir esta Mascarada.”
J. García, The Butcher